El Ministerio de Fomento, intentará “descargar” el tráfico que circula a través de la conexión natural de Barcelona con Lleida y Zaragoza, ampliando a tres carriles la autovía de la A-2, en el tramo Igualda-Martorell, donde gran parte de la circulación son camiones.
La A-2 canaliza diariamente más de 100.000 vehículos que tratan de acceder a Barcelona, en su paso hacia Puerto y la Zona Franca, donde la congestión del tráfico se hace notar dado que la ruta está limitada a 80 kilómetros por hora. El Ministerio de Fomento, plantea la reforma a través de un ante proyecto de un tramo de algo más de 30 kilómetros entre Igualada y Martorell, para mejorar las condiciones de seguridad vial y optimizar el nivel de servicio prestado a los usuarios.
Se contempla incluir carriles de incorporación y desaceleración, por lo que la plataforma viaria duplicaría necesariamente sus dimensiones.